Tras la aseadita jornada del sábado, donde el estado de la pista y la fuerte tendencia favorable a los punteros deslucieron algo las carreras, el domingo nos esperaba la reaparición de Fogoso Marshal en la prueba oficial de la Fegentri, donde destacaba a priori Alhaprince, elegido entre los partants por la amazona española Silvia Zapico. Mucha expectación en el grupo Intocable ante la probabilidad de nuestro representante: Superado el bache volvía a subir, la pista y distancia era el escenario de sus mejores actuaciones y la amazona (la inglesa Gemelle Gracey-Davison, segunda en la general del campeonato) era una garantía.
Llegado el gran momento, la ventaja teórica con la que contaba Fogoso se esfumó, pues las carreras celebradas a lo largo de la mañana habían dejado claro que al secarse los charcos el “bias” imperante el día anterior había desaparecido, dando más opciones a acechadores y rematadores (si bien en Pineda estos últimos siempre lo tienen bastante difícil). Así las cosas, nadie iba a regalar nada y las montas iban a ser claves. Después de dar un poco de guerra en cajones (no se que tendrá este hipódromo, que es el único en el que Fogoso no entra con suma facilidad), el Nene salió en medio del grupo, tratando enseguida Gemelle de situarle al frente. Y fue ahí donde nos encontramos el muro que nos impidió luchar a la postre por la victoria: En el sorteo de cajones a Borken le había correspondido el cajón inmediatamente anterior al nuestro, y el alazán de Nanina fue un obstáculo infranqueable para Fogoso hasta mediada la recta de enfrente, lo que obligó a nuestro ejemplar a realizar la curva por la calle 4, regalando cuerpos y teniendo que hacer un sobreesfuerzo que le pasó factura más tarde.
Mientras, Alhaprince transitaba cómodamente por la calle 1 detrás de Pedrolo, recortando muchos metros en la curva y esperando que los punteros cayesen de maduros. Y así fue; el paso marcado por Fogoso y Borken en su lucha por la punta le pasó factura a ambos en la recta, siendo presa fácil para el de Zapico que se fue a ganar con facilidad. Detrás, Fogoso aguantaba la plata ante Borken por un cuello a punta de látigo, muy bien sostenido por su amazona.
A su regreso a balanzas, Gemelle nos comentaba que
“por más que lo he intentado ha sido imposible hacer la primera curva por dentro, no quería acercarse al caballo que llevaba a la derecha. Eso le ha obligado a hacer la curva por fuera e ir más rápido de lo que teníamos previsto y al final lo ha pagado”. Nada que reprochar al trabajo de la inglesa, que se comportó como toda una profesional. Durante la semana había pedido los links para ver las actuaciones previas del caballo y antes de la jornada recorrió el trazado a pie para reconocerlo. Cuando se montó en Fogoso sabía exactamente lo que tenía debajo y como montarlo, cumpliendo las ordenes a la perfección. Satisfechos pues con la monta, a la que deseamos la mejor de las suertes en su lucha por ser campeona del mundo.
La jornada había comenzado con el cómodo triunfo de Mangano y Diego Sarabia en la prueba reservada a los gentleman, abriendo así el posterior doblete de Río Cubas. El alemán se paró algo en los últimos metros propiciando que se acercasen mucho Piccolo Mix y Tarbrax (los únicos del lote junto al vencedor que tenían los metros), pero su victoria nunca peligró. El cantabro ya nos advirtió entonces que
“la pista se ha secado bastante, pero han quedado una especie de “badenes” en las zonas en las que había charcos que pillan por sorpresa a los caballos y ahí que llevarlos bien controlados”.
El desdoblado se resolvió con el triunfo de Lucky Cote en la primera parte y de Ayer Sali en la segunda. El de Olgado dejó hacer en el recorrido a El Zahir, acechándole en segunda posición. A la entrada de la recta final se abrió, lo que motivó que Burlon se le emparejase por dentro y nos regalasen una preciosa lucha resuelta a favor del viejo, sobre el que mantuvo su racha de buenas actuaciones Andrea Chynoradska.
Por su parte, el tres años de El Drama Social fue el único rematador que consiguió llevarse la victoria en todo el meeting, lo que unido a los 5 cuerpos que metió entre él y sus rivales avisan de las futuras posibilidades del hijo de Medicean. Dexcoco y el debutante Marcos Mahony precedieron en el poste a General Music, que cumplió con los 63 kilazos a cuestas.
Llegado el gran momento, la ventaja teórica con la que contaba Fogoso se esfumó, pues las carreras celebradas a lo largo de la mañana habían dejado claro que al secarse los charcos el “bias” imperante el día anterior había desaparecido, dando más opciones a acechadores y rematadores (si bien en Pineda estos últimos siempre lo tienen bastante difícil). Así las cosas, nadie iba a regalar nada y las montas iban a ser claves. Después de dar un poco de guerra en cajones (no se que tendrá este hipódromo, que es el único en el que Fogoso no entra con suma facilidad), el Nene salió en medio del grupo, tratando enseguida Gemelle de situarle al frente. Y fue ahí donde nos encontramos el muro que nos impidió luchar a la postre por la victoria: En el sorteo de cajones a Borken le había correspondido el cajón inmediatamente anterior al nuestro, y el alazán de Nanina fue un obstáculo infranqueable para Fogoso hasta mediada la recta de enfrente, lo que obligó a nuestro ejemplar a realizar la curva por la calle 4, regalando cuerpos y teniendo que hacer un sobreesfuerzo que le pasó factura más tarde.
Mientras, Alhaprince transitaba cómodamente por la calle 1 detrás de Pedrolo, recortando muchos metros en la curva y esperando que los punteros cayesen de maduros. Y así fue; el paso marcado por Fogoso y Borken en su lucha por la punta le pasó factura a ambos en la recta, siendo presa fácil para el de Zapico que se fue a ganar con facilidad. Detrás, Fogoso aguantaba la plata ante Borken por un cuello a punta de látigo, muy bien sostenido por su amazona.
A su regreso a balanzas, Gemelle nos comentaba que “por más que lo he intentado ha sido imposible hacer la primera curva por dentro, no quería acercarse al caballo que llevaba a la derecha. Eso le ha obligado a hacer la curva por fuera e ir más rápido de lo que teníamos previsto y al final lo ha pagado”. Nada que reprochar al trabajo de la inglesa, que se comportó como toda una profesional. Durante la semana había pedido los links para ver las actuaciones previas del caballo y antes de la jornada recorrió el trazado a pie para reconocerlo. Cuando se montó en Fogoso sabía exactamente lo que tenía debajo y como montarlo, cumpliendo las ordenes a la perfección. Satisfechos pues con la monta, a la que deseamos la mejor de las suertes en su lucha por ser campeona del mundo.
La jornada había comenzado con el cómodo triunfo de Mangano y Diego Sarabia en la prueba reservada a los gentleman, abriendo así el posterior doblete de Río Cubas. El alemán se paró algo en los últimos metros propiciando que se acercasen mucho Piccolo Mix y Tarbrax (los únicos del lote junto al vencedor que tenían los metros), pero su victoria nunca peligró. El cantabro ya nos advirtió entonces que “la pista se ha secado bastante, pero han quedado una especie de “badenes” en las zonas en las que había charcos que pillan por sorpresa a los caballos y ahí que llevarlos bien controlados”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario